Aprovechando que el día primero
de enero es un día sin actividades lo utilicé para ver películas, así me
encontré con un filme francés que se titula Joueuse
(La jugadora) de la directora Carolina Bottaro.
La historia sucede en Córcega, gira alrededor de Hélène (interpretada por
Sandrine Bonnaire), una mucama de hotel que
turna su trabajo con la limpieza de la
casa del Doctor Kröger (Kevin Kline). Su vida parece sin sobresaltos, hasta
que un día encuentra jugando ajedrez a una
mujer americana con su pareja. La intriga que produce en ella este juego la
lleva a buscar aprenderlo.
Hélène encuentra en casa del
doctor Kröger un tablero cerrado y. como
niña que acaba de descubrir un valioso tesoro, sigilosamente lo abre para
descubrir las piezas. Decidida a
aprender el juego y animada por otorgarle un buen regalo de cumpleaños a su
marido, decide comprar un ajedrez electrónico. Dado el poco interés que pone el
marido al juego Hélène comienza a aprender ella sola. Por las noches le dedica
tiempo al ajedrez, se va instruyendo por medio de un cuadernillo que incluía el
juego.
El ajedrez se vuelve una obsesión
para Hélène, quien ve piezas y jugadas en todos los lugares, y con gusto se
desvela para aprender y vencer a la máquina. La vida de esta mujer cambia
totalmente, ella convierte al ajedrez en
eje principal de su vida.
Al ver que no avanza mucho en el
juego, decide pedirle a Kröger ayuda. Ante las negativas del doctor ella
le propone hacerle la limpieza gratis a cambio de que juegue con ella ajedrez.
El doctor Kröger al ver la gran voluntad de Hélène decide jugar con ella.
A partir de este momento cada martes por la tarde ambos se encuentran para
practicar el juego y Kröger le va enseñando a Hélène a jugar mejor al ajedrez.
La relación entre ambos se va
fortaleciendo a la par que Hélène empieza a
enriquecer su juego. Pero ella va a tener que lidiar con rumores de sus
vecinos que difunden el hecho de que ella le es infiel a su marido. Después que
el marido la sigue para espiar lo que hace y decepcionada sobre su capacidad ajedrecística
Hélène opta por dejar de jugar y de asistir a sus clases. Decisión que no dura
mucho, pues en verdad el ajedrez es su pasión.
Después de vencer
consecutivamente a su maestro, él mismo sugiere a la jugadora que es el momento
de competir en torneos. Dudosa de su talento, ella no quiere acceder a la
propuesta, hasta que es convencida por el doctor Kröger. Tras ser humillada por
el director de ajedrez del torneo, (quien resulta el mejor jugador de ajedrez
de Córcega), quien la subestima por ser mujer y dedicarse a hacer la limpieza,
creyendo que no tiene el nivel de juego, ella logra estar en el torneo.
Cuál es la sorpresa del personal
del torneo al notar cómo poco a poco Hélène va anotando victorias, hasta llegar
a enfrentarse con el mejor jugador. Después de una difícil partida Hélène logra
derrotarlo, ganando el torneo.
Aunque puede parecer una temática
común la idea de que una mujer encuentra un mentor que le ayuda a desarrollar
su talento. La jugadora de ajedrez tiene formas originales de abordarla.
Voy a hacer notar que es la
primera película que habla de una jugadora de ajedrez y no de un jugador. Ya
una idea original. Que hace notar el contexto en el que vivimos, donde las
mujeres poco a poco han logrado conquistar terrenos que parecían inaccesibles
para ellas.
Lo que significa el ajedrez para Hélène es también
de notar, pues éste en ella representa
su forma de empoderarse. De ser una mujer pasiva sin mucho protagonismo, el ajedrez la
va formando y le da una fuerza a su vida.
Es importante notar el romance
que ocurre entre la jugadora y el doctor Kröger. Que aunque nunca hay contacto
físico, (un beso de despedida si acaso) ambos crean una fuerte empatía, que se
lleva a profundidad con el juego.
Sobre las partidas de ajedrez,
salvo la partida que juega a ciegas con el doctor Kröger, todas parecen
bastante inverosímiles. El típico cliché
del jaque mate después de tres jugadas, o que en los torneos todas las partidas son ganadas hasta que se
llega al jaque mate. Quienes jugamos ajedrez sabemos que en la mayoría de las
partidas de los torneos quien está en la proximidad de sufrir jaque mate se
rinde antes. En la película nadie tira jamás su rey. Las jugadas igual no presentan
gran profundidad.
Insisto,
la parte destacada de la película no es porque nos develará hermosas
composiciones de ajedrez, sino la temática de que una mujer juegue al ajedrez y
cómo este juego la empodera en su vida.
LA MUJER..... LA MUJER.....Comsidero debe estar en todos los actos de nuestras vidas no consibo una vida sin ellas. Aun mas cuando son inteligentes y saben guardar su lugar. Aportan esa femeneidad que tanto nos cautiva..Lejos de ser machista... son un ser humano yo diria complementario de nuestras vidas.. entonces porque no estar en todos lados... NO ME MATEN LOS NACHISTAS.. PORFA
Gracias por la reseña, sin duda la veré (hasta que la encuentre), muy interesante, coincido con todos tus comentarios (con objetividad), nuevamente GRACIAS.
Acabo de ver la película y coincido con Selene y agego que Helene, la protagonista, aprende a liberar su forma de pensar gracias al ajedrez. Eso es la esencia del juego. Ella aprende a cuestionarse todo, se anima a cambiar su peinado, a defender su pasión, a hablar con su hija de igual a igual. El ajedrez ayuda a liberar nuestra mente.
fin de la informacion
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